GAME OVER
Tenía la mitad de un corazón y la espada cargada. Siguió por el pasillo recubierto de las matas que podía lanzar a voluntad contra el enemigo y vio un enorme cofre azul custodiado por el guardián templario. Fue un movimiento preciso y la muerte lo recibió al instante. Save, Load, Quick 1 y allí estaba de nuevo. Cargó la espada y asestó un golpe que derribó al guardián y el cofre se abrió celebrando: “Has conseguido el Talismán, obtendrás una vida”.
El jugador sonrió y al elevar la cabeza vio unas luces fulgurantes que se dirigían hacia él. Gritó.
Donde se cuenta cómo el Nigromante avanzó con desdén por la colina y al abrir la bolsa de amuletos vió que había tomado equivocadamente unas semillas en lugar de su poderoso talismán, entre otros sucesos dignos de recuerdo.
- ¡Madre mía! Otra vez me volvió a pasar. Nunca llegaré a la cima- se lamentaba mientras dejaba caer las semillas en una especie de tumba que se había abierto en la tierra.
Cuando dio media vuelta, el nigromante sintió unas hojas que rozaban su cuello y vio sin comprender un enorme árbol de flores recién nacido de las semillas. Trepó por él hasta la cima del monte y anticipó la amonestación de su maestro por no saber distinguir los talismanes.
El Riesgo de la Comida Chatarra
(El siguiente microrrelato ha sido descalificado del concurso y no podrá ser publicado en forma impresa por inflingir el uso de la marca comercial de McDonald's Corporation)
¡El misterio del más allá llegó a Mc.Roland! Ahora con tu “Cajita Feliz” te llevás de regalo un talismán de la suerte ¡Hay siete modelos diferentes para coleccionar!Vení a Mc.Roland y hace de tu vida una ruleta. Ta ra ta tata. Me encanta.
Tenía la mitad de un corazón y la espada cargada. Siguió por el pasillo recubierto de las matas que podía lanzar a voluntad contra el enemigo y vio un enorme cofre azul custodiado por el guardián templario. Fue un movimiento preciso y la muerte lo recibió al instante. Save, Load, Quick 1 y allí estaba de nuevo. Cargó la espada y asestó un golpe que derribó al guardián y el cofre se abrió celebrando: “Has conseguido el Talismán, obtendrás una vida”.
El jugador sonrió y al elevar la cabeza vio unas luces fulgurantes que se dirigían hacia él. Gritó.
Princesa Zelda
- ¡Madre mía! Otra vez me volvió a pasar. Nunca llegaré a la cima- se lamentaba mientras dejaba caer las semillas en una especie de tumba que se había abierto en la tierra.
Cuando dio media vuelta, el nigromante sintió unas hojas que rozaban su cuello y vio sin comprender un enorme árbol de flores recién nacido de las semillas. Trepó por él hasta la cima del monte y anticipó la amonestación de su maestro por no saber distinguir los talismanes.
Princesa Zelda
(El siguiente microrrelato ha sido descalificado del concurso y no podrá ser publicado en forma impresa por inflingir el uso de la marca comercial de McDonald's Corporation)
¡El misterio del más allá llegó a Mc.Roland! Ahora con tu “Cajita Feliz” te llevás de regalo un talismán de la suerte ¡Hay siete modelos diferentes para coleccionar!Vení a Mc.Roland y hace de tu vida una ruleta. Ta ra ta tata. Me encanta.
Princesa Zelda
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